Tete, entrenador del Ribeiro Juvenil, dimitió en la tarde del sábado, nada más acabar el partido jugado en el Xestal contra el Calasancio B, donde los locales cosecharon la tercera derrota consecutiva.
Todo parece indicar que la dimisión de Tete es consecuencia de varios factores. El más importante, desde mi punto de vista, es la falta de compromiso de la mayoría de los jugadores de la plantilla, una situación que ya veníamos advirtiendo, y que lejos de solucionar se ha ido acrecentando. Por otro lado están los resultados, consecuencia de lo dicho anteriormente,, y por último la utilización de varios jugadores de forma repetitiva y que obliga a varios jugadores a repetir partido cada fin de semana.
El partido del sábado contra el Calasancio fue un claro reflejo de lo expuesto. Una primera parte en que el Ribeiro de adelantó por medio de Cani al recoger el balón despejados por el portero y después de disparar al poste recogió nuevamente el balón para marcar. Poco después el Calasancio empata al aprovechar un error defensivo. La segunda parte comenzó con un nuevo gol visitante que puso muy nervioso al Ribeiro y aunque Rodri empató al coger un despeje del portero a tiro de Ángel, el Calasancio se hizo dueño del encuentro sin que hubiera reacción local. Con el gol en propia puerta de Rojo el equipo se desquició. Tercera derrota en esta fase final, equipo deshecho, sin entrenador y veremos como se acaba la temporada, si, al final, se acaba.
Lo podremos comprobar el próximo partido en Verin antes de las vacaciones.
Mala pinta tiene esto de los juveniles, me duele pq me parece que tenían un muy buen equipo, no creo que encuentren un entrenador mejor que el que tenían
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